Una persecución policial de más de seis horas de duración atravesó desde el sur de Los Angeles hasta San Pedro, incluyendo los valles de San Fernando y San Gabriel.
Una persecución policial de seis horas de un hombre que se creía posiblemente armado, se movió erráticamente el martes por la noche por el sur de Los Ángeles y a baja velocidad en varias autopistas del sur de California antes de concluir a unas 40 millas al este de Los Ángeles.
La persecución comenzó alrededor de las 7:04 p.m., luego de un reporte de un hombre con un arma, según el Departamento de Policía de Los Ángeles (LAPD). Después de que la persecución terminó en Ontario, la policía dijo que no se encontró ningún arma.
El sargento Juan García estaba entre los policías involucrados en la persecución y dijo que la posibilidad de que el hombre estuviera armado fue una de las razones por las que los oficiales no intentaron una maniobra PIT para hacer girar el auto y terminar la persecución maratónica.
En sus 20 años en el departamento, García dijo que nunca había oído hablar de una persecución durante tanto tiempo y agregó que muchos oficiales tuvieron que usar su propio dinero para llenar el tanque de gasolina de sus vehículos.
El conductor aparentemente tenía el tanque lleno de gasolina, dijo.
El conductor fue arrestado bajo sospecha de delito de evasión. También tenía dos órdenes de arresto pendientes por robo, dijo la policía.
California
El Newschopper4, de la estación hermana NBC4 comenzó a transmitir la persecución alrededor de las 7:10 p.m., mientras el automóvil estaba en un vecindario a alta velocidad. El auto plateado estuvo incluso en el carril equivocado de la calle varias veces.
El conductor estuvo acelerando en el Bulevar La Ciénega, en dirección norte, antes de entrar en la Avenida Slauson. Varias veces, el conductor volvió a salirse del carril correcto para evitar el tráfico y pasó las luces rojas.
El chofer decidió luego dirigirse por el Bulevar Crenshaw en dirección sur, procediendo a recorrer imprudentemente el vecindario de Hyde Park durante un tiempo prolongado, regresando varias veces al Bulevar Crenshaw.
El conductor entró en la Autopista 110 en dirección sur, se incorporó a la autopista a baja velocidad y cambió de carril durante su trayecto. El conductor parecía estar en un teléfono celular mientras conducía.
La persecución continuó en la Autopista 110 en dirección sur, alrededor de las 7:53 p.m., pasando la Autopista 105. Si bien el conductor estuvo ocasionalmente por debajo del límite de velocidad permitido, el automóvil también alcanzó más de 90 mph.
En un momento, la persecución estuvo en la Autopista 110 en dirección sur en Wilmington, en donde el conductor parecía cambiarse de ropa dentro del auto. Después de llegar al final de la Autopista 110 en San Pedro, el conductor hizo un giro en U y regresó hacia el norte por la Autopista 110.
Las velocidades de persecución se redujeron drásticamente, con el automóvil moviéndose constantemente a 30-40 mph e incluso descendiendo a velocidades de un solo dígito varias veces.
Después de viajar por la autopista durante un período prolongado de tiempo, la persecución finalmente llegó al centro de Los Ángeles, alrededor de las 9:05 p.m., casi dos horas después de que comenzara la persecución.
Mientras continuaba moviéndose a baja velocidad, la persecución pasó la marca de las tres horas en la Autopista 10 con los neumáticos delanteros del auto muy dañados.
La persecución continuó por la Autopista 10 y llegó a Baldwin Park, poco después de las 11 p.m., alcanzando la marca de las cuatro horas con el neumático delantero izquierdo completamente montado sobre llantas de metal.
Mientras el conductor continuaba jugando al gato y al ratón con la policía, la persecución se extendió hasta su quinta hora.
La acumulación de tráfico detrás de la persecución se podía ver por millas, ya que los autos se vieron obligados a viajar al ritmo lento establecido por el vehículo de persecución.
Acercándose a las seis horas, el Chevy plateado continuó jugando con la policía a detenerse para después arrancar mientras pasaba por el cruce de la Avenida Kellogg.
En la última hora de la persecución, las chispas volaron cuando el auto aparentemente ya había tenido suficiente de conducir sin llantas. La persecución finalmente terminó, y el conductor abrió la puerta y salió.
Sin embargo, el conductor no se rindió de inmediato, ya que siguió bajando las manos a los costados después de levantarlas.
El enfrentamiento continuó pero el helicóptero tuvo que irse ya que el conductor estaba literalmente en un enfrentamiento con la policía en la Autopista 10 en Ontario, a la 1:25 a.m.
Momentos después, el fotoperiodista de la NBCLA, Alex Vásquez, informó que la policía había arrestado al conductor y puso fin a la maratónica persecución.
