* El video de este artículo corresponde a un reporte previo sobre el crédito fiscal.
Como parte de la nueva ley en materia de clima, impuestos y salud, el gobierno de Estados Unidos está poniendo en marcha su plan de brindar nuevos créditos fiscales a los compradores de vehículos eléctricos.
Varios sitios web nuevos se lanzaron el martes para ayudar a la gente a identificar qué vehículos cubren los requisitos para dichos créditos.
Según los datos presentados a la Administración Nacional de Seguridad del Tráfico en las Carreteras (NHTSA, por sus siglas en inglés), al menos 31 modelos nuevos año 2022 y 2023 califican para el crédito fiscal.
De entrada, tienen que estar fabricados en Norteamérica para ser elegibles.
El presidente Joe Biden firmó el martes la iniciativa de ley sobre el cambio climático y la atención médica. En ella se incluye un crédito fiscal de hasta $7,500 dólares que podría utilizarse para financiar la compra de un vehículo eléctrico.
¿Qué modelos son elegibles para el crédito? La pick-up eléctrica Ford Serie F 2022, el BMW X5, el Nissan Leaf, el Chevrolet Bolt, el Jeep Wrangler híbrido enchufable y los cuatro modelos de Tesla, entre otros.
Pero algunos modelos podrían superar los límites de precio establecidos en la compleja ley, y está por verse si los fabricantes de automóviles serán capaces de encontrar minerales o fabricar baterías que puedan hacerse acreedores a los créditos.
Los consumidores pueden entrar en la página web https://vpic.nhtsa.dot.gov/decoder/ e introducir los 17 dígitos del número de identificación del vehículo que quieren comprar para asegurarse de que está fabricado en Estados Unidos, Canadá o México.
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El Departamento del Tesoro también publicó una página de preguntas frecuentes sobre las disposiciones de la nueva ley.
A partir del martes, los créditos fiscales ya no se aplicarán a los vehículos ensamblados fuera de Estados Unidos, Canadá o México. Pero las personas que hayan firmado contratos de compra de vehículos eléctricos antes del martes podrán recibir los créditos.
El resto de las disposiciones de la ley relativas a los vehículos eléctricos entrarán en vigor el 1 de enero.
Un funcionario del Departamento del Tesoro declaró el martes a los periodistas que el plan pone al alcance los objetivos climáticos de EEUU para 2030 y ayudará a garantizar que los estadounidenses puedan comprar un coche eléctrico.
La aprobación de la medida hizo que los fabricantes de automóviles aceleraran la tarea de hallar baterías fabricadas en Norteamérica y minerales para baterías procedentes de Estados Unidos, Canadá o México, con el fin de garantizar que los vehículos eléctricos puedan ser elegibles para el crédito.
Aunque los fabricantes de automóviles han estado anunciando fábricas de baterías en EEUU y tratando de asegurar el abastecimiento nacional de minerales, una importante asociación comercial del sector ha advertido que la gran mayoría de los vehículos eléctricos que se venden ahora en Estados Unidos no podrían acogerse a la totalidad del crédito incluido en la Ley de Reducción de la Inflación.
“Estamos trabajando horas extra para localizar nuestras cadenas de suministro y aumentar la producción”, dijo en un comunicado Chris Smith, director de asuntos gubernamentales de Ford.