WASHINGTON - Una medida de la inflación observada atentamente por la Reserva Federal se mantuvo en un nivel bajo el mes pasado, ampliando una tendencia de enfriamiento en el aumento de los precios, que prepara el camino para que la Reserva Federal (Fed) comience a recortar su tasa clave de interés el mes próximo, por primera vez en cuatro años y medio.
Los presos aumentaron tan sólo 0.2% de junio a julio, informó el viernes el Departamento de Comercio, un minúsculo incremento con respecto al aumento de 0.1% del mes previo.
En comparación con el año anterior, la inflación permaneció sin cambios, en 2.5%. Esto es sólo un poco por encima del nivel objetivo de la Fed, de 2%.
La desaceleración de la inflación podría frustrar los esfuerzos del expresidente Donald Trump de culpar a la vicepresidenta Kamala Harris de los altos precios.
Aun así, a pesar que los altos índices de inflación se acercan a su fin, muchos estadounidenses siguen descontentos con los precios promedio marcadamente altos en productos básicos como la gasolina, los alimentos y la vivienda, comparados con los niveles previos a la pandemia.
Sin tomar en cuenta los volátiles costos de alimentos y energéticos, la llamada inflación subyacente aumentó 0.2% de junio a julio, lo mismo que un mes antes.
En comparación con el año anterior, los precios básicos aumentaron 2.6%, también sin cambios en comparación con el año previo.
Los economistas observan atentamente los precios básicos, que generalmente proporcionan un mejor panorama de las futuras tendencias de la inflación.
Las cifras del viernes subrayan que la inflación desciende a un ritmo constante en Estados Unidos después de tres dolorosos años de que los altos precios afectaron la economía de muchas familias.
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Según la medición reportada el viernes, la inflación alcanzó un punto máximo de 7.1% en junio de 2022, la más alta en cuatro décadas, antes de reducirse continuamente.