Inquilinos de zonas no incorporadas del condado de Alameda, como Cherryland y Ashland podrían finalmente tener más protecciones contra los desalojos cuando no son por culpa de ellos.
Angelica Canchola, coordinadora de Padres Unidos Cherryland, aseguró que en su área lo que sobra son inquilinos que necesitan reparaciones en sus propiedades.
“Qué hace uno para que no le aumenten la renta, o no le digan nada, o incluso lo corran, pues se queda uno callado”, dijo Angelica.
Por eso ve con esperanza que la Junta de Supervisores del condado de Alameda aprobara en primera vuelta una ordenanza contra los desalojos injustos, ordenanza que llevan trabajando por siete años.
“Especificar que no se puede usar el desalojo como represalia, aunque dice en la ley estatal, hemos visto muchos casos localmente que sí son”, indicó María Miranda, vocera de la organización My Eden Voice.
Además, requiere que los propietarios paguen un costo de reubicación al inquilino, si lo desalojan por una razón injustificada.
Este sería equivalente a dos meses de la renta mensual, y no solo un mes como lo dice la ley estatal. Así mismo, en vez de 60 días, tendrían que darles 90 días de notificación si en la familia hay algún miembro de comunidades vulnerables.
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“Si en la familia hay alguien menor de 18 años, con discapacidades o alguien de la tercera edad”, explicó Miranda.
Esta ordenanza solo cubriría a dueños de 5 unidades o más en las zonas no incorporadas del condado Alameda, se podrían beneficiar más de 6,000 inquilinos, especialmente los que habitan en casas unifamiliares.
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“Vemos que muchas personas aquí son latinas, especialmente en Cherryland y Ashland entonces sí va a haber gran impacto para familias latinas sabiendo que no pueden desalojar sin razón”, aseveró Miranda.
Pero falta una segunda vuelta en la votación, y estas organizaciones esperan que ahí se confirme el voto de la primera y no se descarrile la ordenanza, sobre todo porque dicen es mucho lo que la gente aguanta.