Una protesta tomó un giro violento en Oakland el viernes por la noche con fuegos encendidos y ventanas rotas. Esto siguió a una manifestación pacífica de Daunte Wright y Adam Toledo, ambos muertos a tiros por la policía.
La ciudad instó a quienes viven y trabajan en el centro de la ciudad a prepararse para la posibilidad de más protestas en los próximos días a medida que finaliza el juicio de Derek Chauvin y crece la indignación por los mortíferos tiroteos policiales de Toledo, de 13 años, en Chicago y Wright en Minnesota.
"Es simplemente preventivo", dijo Jarret Whitmore, gerente del dispensario de cannabis Have a Heart. "Lo entiendo. De hecho, no estoy enojado con eso".
Whitmore sabía que algo estaba pasando cuando se presentó a trabajar el viernes.
"También noté la barricada allá", dijo. "Creo que es mejor prevenir que curar, especialmente cuando todas las protestas se reúnen aquí, frente al departamento de policía".
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Habla de lo que sucedió en Oakland el año pasado después de la muerte de George Floyd y el verano de ajuste de cuentas racial que siguió.
Como gerente de un negocio propiedad de negros, Whitmore se siente seguro, pero también dijo que hay motivos para indignarse.
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"Y luego el nuevo video del niño de 13 años en Chicago, lo entiendo totalmente", dijo.
La ciudad dijo que continuará facilitando manifestaciones pacíficas, pero también está recordando a las empresas y a quienes viven en el centro que enciendan sus sistemas de vigilancia si los tienen.
