La celebración del Día de Acción de Gracias se llevó a cabo como ningún otro año, y aunque el viernes negro no ha sido cancelado, varios negocios permanecieron cerrados en visperas de este popular día.
Como un pueblo fantasma es como se encuentran las calles de la ciudad de San José y así permaneció a lo largo del día.
“Hacia una fila desde muy temprano, vuelo desde la medianoche para ser de los primeros en entrar a esa tienda, pues hoy no”, dijo un miembro de la comunidad. “Hoy se mira todo bien triste, bueno, por lo mismo de la epidemia”
Este año a diferencia de otros los exteriores de los establecimientos no se llenaron de compradores acampando a la espera de que se abran las puertas de sus tiendas favoritas, con la esperanza de aprovechar las rebajas, la falta de consumidores podría ser un duro golpe a la economía
“La verdad muy lamentable que las ventas hayan bajado pero esperamos seguir con bien y salir adelante y recibir el año como se debe, y que todos hagamos conciencia de que estemos en casa”, dijo un residente.
El aumento de casos de contagio en el condado Santa Clara, el toque de queda y el nuevo horario especial del Viernes Negro implementado este año por los negocios para cumplir con las restricciones estatales y locales podrían ser la razón por la cual los consumidores prefirieron quedarse en casa
Las autoridades de salud exhortan a la comunidad a cumplir con las normas para evitar la propagación del virus, ya que los hospitales temen llegar a su capacidad y no poder contar con los centros de salud de los condados vecinos, en el Área de la Bahía, ya que todos estamos en la misma situación
Local
Los supermercados deben operar al 50 por ciento de su capacidad, mientras que las tiendas comerciales deben permanecer con el 25 por ciento de su capacidad
Las multas serán de 250 a 5 mil dólares y no serán perdonadas.
